viernes, abril 30, 2004

Qué bolú...

Mi viejo estuvo de visita en Buenos Aires. Vino por cuestiones de su laburo.
Es una persona mayor. Camina con dificultad.
Anoche, cuando volvimos del Escritorio, para facilitarle las cosas dejé el auto estacionado en la puerta del edificio donde vivo, en vez de dejarlo en el garage (para que no tenga que caminar tanto).
Y allí quedó el pobre (auto), durmiendo en la calle.
Hasta que se hizo de día (hoy viernes) y yo ni cuenta me di, y se lo llevó la maldita grúa. Tuve que ir a buscarlo a la playa donde llevan los autos que levantan. ¡Qué embole, la puta madre!.
Cuando lo fui a buscar ahí estaba él, estacionado en esa playa, con cara de abandonado. Medio ofendido, se hizo el difícil para arrancar. Le expliqué que no era para tanto, que había sido sólo un olvido. Después se puso bien.
Aunque, después de todo, auto de mierda! ¡Las veces que me habrás dejado varado en plena ruta! (como muestra este video optimizado para banda ancha)

Una mejilla, la otra, y después las 2 juntas

Son las 10 de la mañana. En este momento uno de mis amigos más cercanos está tomándose un avión desde Tucumán hacia acá.
Su novia está en Buenos Aires desde hace 2 meses haciendo un curso, y se queda 2 meses más.
No están bien (hace rato) y ayer ella, con poco tino, le dijo por teléfono de cortar. Por teléfono! cruel!
Ahora, me parece una estupidez lo de él, de venirse a Buenos Aires para que lo pateen... en fin, él sabrá.

miércoles, abril 28, 2004

Posibilidades

Con más tiempo para divagar, me di cuenta que ya no es ridículo pensar en la posibilidad de volver a Tucumán.
Desde que llegué acá hace 2 años y medio y hasta hace poco, esa posibilidad no me entraba en la cabeza: directamente me parecía que implicaría un fracaso (por no concretar de mis proyectos).
Pero, siendo que ya a la semana de estar aquí me di contra la pared en algunas de las cosas que esperaba (por eso, nunca hay que esperar nada), mi proyecto cambió bruscamente, y ya no es ridículo pensar en que, con mi titulito bajo el brazo, y un laburo allá (pequeño detalle ese), volver es una opción más.
Así, ya no es ridículo plantearme esa posibilidad.
¿Que si influye mi actual estado de ánimo para pensar en esa opción? Sin duda, pero igual...
Veremos qué depara el nuevo año.
Mientras, recuerdo a mis amigos.

lunes, abril 26, 2004

¿Con o sin comentarios?

En el laburo ya no nos dejan usar el Messenger, y muy poco navegar ("sólo Clarín y La Nación", palabras textuales de mi superlotuda -digo supervisora-).
Así que los momentos tranquilos -de poco laburo- los paso visitando weblogs, con el cagazo de que me vea la superlotuda y me cague a puteadas o me ponga un "warning" (sanción ridícula tipo "amonestación" de la secundaria, pero con consecuencias económicas: perdés premios).
Cuestión que veo algunos en los cuales los comentarios de la gente son puestos más bien por obligación. Otros en los que el visitante se desubica. Y otros que no tienen configurada la opción de dejar comentarios, y aún así siguen siendo buenísimos (onda, no porque no pueda dejar un comentario dejaría de visitarlo).
Estoy en la duda de si poner o no la opción de los comments. Pasa que muchas veces uno espera simplemente contar algo, sin necesidad de un feedback. Cachái?

domingo, abril 18, 2004

See you later aligator...

Hoy mi novia terminó de decidir que no sabe bien qué le pasa, "y como extender esta situación en el tiempo no es justo" (para mí), me "propuso" que cada uno siga su camino.
Me quedé mudo, no sólo porque esa decisión era relativamente inesperada, sino también porque no tengo ganas de ponerme a convencer a nadie de que me quiera.
Sigo la flecha...

lunes, abril 05, 2004

Una voz en el teléfono

Hoy mi chica me llamó.
Con voz de ansiedad, y se despachó contenta con una catarata de noticias ("lo que hice en estos dos días que no nos vimos"). Y me preguntó por mí también.
Debo decir que sí esperaba una llamada, pero no 48 horas después de pedirme un tiempo. O sea, si estamos acostumbrados a vernos sólo los fines de semana -por la distancia- y eso quiere decir que normalmente pasan 5 días entre cada vez que nos vemos, por qué ahora le agarra extrañitis? ¿Sólo porque me pidió "un tiempo"?. ¿Quién las entiende?
Por supuesto, esta llamada me dejó ilusionado (sobre cómo pueden terminar las cosas).
Se que no debo, pero...

sábado, abril 03, 2004

Regresión

Hoy mi chica me pidió un tiempo.
Sí, como si tuviésemos 14 años.
Estaba boludísima. Cero demostrativa (cuando en realidad, en esa materia ella tenía un 3, digamos). Fuimos a comer a lo de mis primos, donde estaba bastante seria.
Y a la vuelta a su casa mantuvo esa seriedad, con el agregado de que no hablaba casi nada. O sea, digamos que por dentro me pedía a gritos que le pregunte qué le pasaba (qué cagona!).
Pero bueno, accedí a su pedido enviado por telepatía, y le pregunté qué le pasaba, a lo que, con cara de alivio por el cuestionamiento, me dijo "no se" (premio a la explicación!). Y acto seguido me explicó que no estaba bien, y que no el no saber por qué no le nacía decirme "cosas" ni hacer ciertas cosas le parecía llamativo. Así que nos tomamos un tiempo.
Y ahora con quién voy a la fiesta de 15 la semana que viene?? ;)